Las tropas inglesas, siguiendo sus tácticas de hostigamiento a la guerrilla, se encuentran saqueando una granja Bóer cuando son sorprendidos por el enemigo.
Los refuerzos ingleses avanzan para apoyar a los suyos.
Una turba de Bóers surge de las montañas cercanas causando estragos con su puntería endiablada.
El ganado relincha asustado por los disparos...
....que también alertan al primo Van Zjil, el cual acude presto con sus muchachos a defender la granja de la familia.
Los ingleses intentan llegar a la granja antes de que sus compañeros sean diezmados.
El reducto inglés en la zona había sido abandonado...
Mientras, en la granja se produce una lucha sin cuartel, las bajas se van acumulando sobre todo en el lado británico. La mula, que transporta explosivos en los fardos, acabará saltando por los aires dejando la casa en ruinas.
Algunas muestras del heterogéneo equipamiento Bóer.
La puntería y arrojo de estos curtidos granjeros es proverbial.
La situación es desesperada y una última carga suicida acaba con todos los ingleses.
Los granjeros se regocijan en la victoria.
Cuando finalmente llegan los refuerzos a la granja nadie queda vivo, pero son capaces de retomarla al enemigo.
El primo Van Zjil regresa a su granja sólo para descubrir que su familia (incluído el veterinario) ha sido masacrada. Impulsado por la venganza, se lleva a un par de ingleses por delante antes de ser abatido. Una victoria británica por los pelos.
Gracias a Carlos por currárselo tan bien y ,como siempre, a Cómics & Mazmorras por dejarnos una mesita y aguantarnos dando voces toda la tarde.